¿ Pero qué ocurriría si uno de los dos correrdores se sale del camino de la carrera o decide abandonar?. Para empezar, seguir corriendo. No podemos detenernos porque no nos acompañen, seguimos teniendo dos piernas para correr, así que...... adelante. Nuestro primer intento, será conseguir que la carrera vuelva a ser la que era. Aunque en algún momento hayamos necesitado detenernos, y uno de los dos corredores se haya salido de la calle de salida, debemos luchar por conseguir esa meta que veíamos tan clara al comienzo. Si una caída de cualquiera de los dos participantes ha detenido la carrera, se podrán curar las heridas y seguir avanzando juntos. El problema puede surgir cuando de repente esa meta final empieza a desdibujarse, ya no es tan sólida como al principio, cada uno empieza a trazar otras metas por separado. Entonces tendremos que pensar que merece la pena detenernos a contemplar , lo que perdemos al distraernos con otros objetivos. Es grande el esfuerzo que nos ha co
Vacunas para la mente. Cuidar nuestro equilibrio y protegernos para estar sanos emocionalmente.