La palabra alexitímia proviene de las raices griegas a-sin, lexi-palabra, thimios-afecto, es decir sin palabras para las emociones.
Se define como la incapacidad de expresar verbalmente las emociones debido a que no se puede identificar los propios sentimientos, ni entenderlos o describirlos.
Es un trastorno, que lo padecen muchas personas, sin ser conscientes de ello.
Aunque normalmente está presente, en patologías como depresión, trastornos de conducta alimentaria, adicciones y fobias, puede estar presente en la vida de muchos individuos que no identifican su frialdad y practicidad ante la vida, como un problema.
Esta dificultad no está solo en poder clasificar las emociones propias, sino que también son incapaces de identificar las emociones de los demás.
Son personas carentes de fantasía, y con un comportamiento poco flexible.
Ellos mismos defienden esta actitud como mecanismo de defensa para adaptarse a un mundo donde hay que ser prácticos y racionales.
Y es esta creencia es la que les lleva poco a poco a "anestesiar" su realidad psíquica, a la que no podemos obviar.
Después de investigaciones a lo largo de los años, se ha identificado como factor clave para la aparición de la alexitímia, los modelos socioculturales y familiares en los que nos desarrollamos. A lo largo de la historia, y en generaciones pasadas no muy lejanas, las demostraciones de afecto y las expresiones de afectividad, se han entendido como síntomas de debilidad y en muchos casos se han censurado.
Por lo que una persona que no ha tenido en su repertorio de conductas a imitar, ni en su vocabulario común la utilización de emociones de manera frecuente, llegará a su edad adulta, con dificultades para expresar, sentir e identificar dichos sentimientos.
Por lo que una persona que no ha tenido en su repertorio de conductas a imitar, ni en su vocabulario común la utilización de emociones de manera frecuente, llegará a su edad adulta, con dificultades para expresar, sentir e identificar dichos sentimientos.
Podemos entender que estamos ante "analfabetos emocionales", en los que el mundo de las emociones es algo oscuro y desconocido.
Muchas veces el estado físico que las emociones nos causan las entendemos como malestar general, y no somos capaces de relacionar cada emoción con su consecuencia fisica.
El mundo de las emociones está empobrecido, por la escasa clasificación que de ellas hacemos, nos situamos normalmente en opuestos, y no somos conscientes de la cantidad de matices y la diferentes intensidades de cada una de ellas.
Hay 6 emociones básicas, a las que debemos añadir 2 más, pero cada una de ellas se puede abrir como un abanico con diferentes rangos. A continuación aparecen las emociones, solo con algunos de los matices que se le pueden dar a cada una de ellas.
- MIEDO: Ansiedad, desconfianza, inquietud, preocupación, remordimiento, sospecha, nerviosismo, inseguridad.
- SORPRESA: Asombro, estupefacción, sobresalto,desconcierto,
- ASCO: Aversión, repulsión, desprecio, disgusto,menosprecio.
- IRA: Cólera, enojo, mal genio, fastidio, impaciencia, irritabilidad, ira, odio, indignación.
- ALEGRIA: Disfrute, alivio, diversión, gratificación, orgullo, satisfacción, euforia, bienestar, seguridad, optimismo.
- TRISTEZA: Aflicción, autocompasión, melancolía, desesperanza, pena, soledad,
nostalgia, duelo, desaliento, aislamiento, pesimismo.
7. AMOR: Aceptación, confianza, ternura, caridad, gentileza, dedicación.
8.VERGÜENZA:Arrepentimiento,humillación, mortificación, pena, remordimiento, culpa.
Si aprendemos a utilizar cada una de ellas, dándole el valor que le corresponde podremos, aliviar en muchos casos, el malestar producido por la mala utilización de nuestro vocabulario emocional.
Por poner un ejemplo no es lo mismo, la sensación que nos producirá pensar, que estamos de muy mal humor porque hemos perdido el autobús, a entender que lo que realmente deberíamos sentir es fastidio, ya que el mal humor quedará durante todo el día, y el fastidio se disipará al coger el siguiente autobús. Y así con multitud de situaciones en nuestro día a día.
Para otra de las cosas importantes que debemos manejar este vocabulario, es para dedicar nuestro momento diario a preguntarnos ¿qué tal?.
¿Cuantas veces al día hacemos esa pregunta a amigos, pareja, hijos.......?. A nosotros mismos nos cuesta saber como es nuestro estado emocional cada día, solo lo identificamos si nos produce consecuencias fisiológicas evidentes, y es entonces cuando la intensidad es tan alta que el cuerpo nos pide a gritos que le atendamos, ya que normalmente no le escuchamos.
Aprendamos entonces a "leer" , a expresar y a sentir las emociones.
Comentarios
Publicar un comentario